lunes, 14 de mayo de 2012

Sabes... ayer me puse a recordar. Empecé a leer las entradas, tablones... que me hacías. Por un momento recordé todos esos buenos momentos, cortos pero intensos, donde era feliz. Al comparar esos momentos con estos... una lágrima cayó por mi mejilla. Ya no es igual. Tú no me das razones, no encuentro nada por lo que hayas podido cambiar. Lo nuestro, o lo que queda de ello, se ha enfriado. Ya no sé qué hacer... si seguir con esto o acabar por una vez por todas. ¿Sabes esa jodida sensación en la que sientes que ya no le importas, que está borde, frío, que no se interesa por ti...? Yo sí, contigo, ahora, desde hace unos meses. No vale la pena estar mal, preocuparme por si me sigues queriendo o no, lo que tenga que pasar, pasará. Ya estoy acostumbrada a no verte, a que nos peleemos constantemente, a que estés borde, que estés frío conmigo y no te importe cómo me sienta, cómo me sienta el que estés así conmigo. No te importa si lloro por ti, por esta situación que la has causado tú solito. Y ¿sabes qué? todo eso me da igual. me das igual.

No hay comentarios:

Publicar un comentario